Fotos:
Tenshi, bebé de Vanesa Ganiko (2007)
Naty y yo, a mis 10 años, el el parque del barrio
A mis 9 años, cuando todo el mundo me cabÃa en una mano, y los sueños se amarraban al borde de la cama, conocà a Vanesa.
Ella, junto a “el grupo de Navarro” (Calle en la que vivà de los 9 a los 14 años), fueron mi primer grupo de amigos.
En esos tiempos creÃamos que nuestra vida serÃa siempre asÃ...
Ella, junto a “el grupo de Navarro” (Calle en la que vivà de los 9 a los 14 años), fueron mi primer grupo de amigos.
En esos tiempos creÃamos que nuestra vida serÃa siempre asÃ...
juntábamos botellas de vidrio de nuestras casas, y con el ticket que nos daban, comprábamos lo necesario para un picnic en el parque.
Paseábamos por la plaza de ATC, donde aprendà a patinar luego de varias caÃdas...
No nos perdÃamos los corsos del carnaval, donde, armados de agua y espuma, nos perseguÃamos unos a otros...
En la cuadra, estaba “La Chola”, una señora mayor que no nos dejaba pisar su vereda, por eso, nos colocábamos enfrente a tirarle serenatas...o uno que otro petardo poderoso que despertaba la alarma de su vehÃculo...
En la vuelta de casa estaba “el Chichipio”; un kiosquero malhumorado que siempre nos cobraba todo mas caro...hasta el dÃa en que, corriendo por su puerta le lanzamos una bombita de olor...todos huyeron, pero a mi me atraparon....
Amigos, con los que nos abrazamos a las doce campanadas del Nuevo Año....y esperábamos despiertos a que el sol acariciara el primer dÃa del Año.
Con ellos vivimos las alegrÃas de las primeras primaveras del alma...los primeros amores y desamores...nuestros bailes y pijamadas...
Fuimos testigos de los primeros besos, de las primeras lágrimas...y sin darnos cuenta, dejamos de ser niños....para caminar nuestros propios caminos...
Caminos angostos, en los que no habÃa espacio para todos...donde las opciones, buenas y malas, se nos ofrecieron en distintas bandejas, y fueron haciendo mas larga la distancia del abrazo.
Hoy, recibà en mi Email, una foto de Tenshi, el primer hijo de Vanesa...al verlo sonreÃ, recordé esos dÃas donde Tom Cruise o Axel Rose, eran nuestro tema preferido...
Recuerdo lo triste de su partida, cuando por razones laborales de sus padres, debió partir a Japón....creÃamos que todo acabarÃa...pero hoy, luego de tantos años...la amistad no ha meurto...el amor no ha sido vencido por la distancia...Verla convertida en madre, con su hijo en brazos, me obliga a pensar en todos los otros, en los que hoy están silenciados por la lejanÃa de las opciones, por la acción del tiempo sobre los afectos, por este mundo que a diario amenaza con apresarnos mas, volviéndonos extraños con los que amamos.
Nadie más que ellos podrán dar vida a todos aquellos dÃas donde soñar nos era permitido, donde nos dolÃa “Malvinas”; que nos quedaba cerca...donde fuimos un solo grito con “La Mano de Dios” de Maradona....
Si, nadie mas que ellos pueden vibran al unÃsono con mi alma.
Los extraño...extraño aquellos dÃas...No sé si algún dÃa volveremos a juntarnos...algunos, como Walter, han dicho adiós en el camino....pero si estoy segura que donde sea que estén, seguirán siendo parte de mi vida, seguirá mi oración convocándolos cada mañana....y seguirá el recuerdo, refugiándome en el abrazo amistoso, cuando necesite estar cerca de alguien que realmente sepa quién soy.
Vane, Naty, Maru, Romy, Leo Chico, Leo Grande, MatÃas, Nico, Toty, Pablo F., Pablo, Walter...
Los quiero mucho....ROmy
Paseábamos por la plaza de ATC, donde aprendà a patinar luego de varias caÃdas...
No nos perdÃamos los corsos del carnaval, donde, armados de agua y espuma, nos perseguÃamos unos a otros...
En la cuadra, estaba “La Chola”, una señora mayor que no nos dejaba pisar su vereda, por eso, nos colocábamos enfrente a tirarle serenatas...o uno que otro petardo poderoso que despertaba la alarma de su vehÃculo...
En la vuelta de casa estaba “el Chichipio”; un kiosquero malhumorado que siempre nos cobraba todo mas caro...hasta el dÃa en que, corriendo por su puerta le lanzamos una bombita de olor...todos huyeron, pero a mi me atraparon....
Amigos, con los que nos abrazamos a las doce campanadas del Nuevo Año....y esperábamos despiertos a que el sol acariciara el primer dÃa del Año.
Con ellos vivimos las alegrÃas de las primeras primaveras del alma...los primeros amores y desamores...nuestros bailes y pijamadas...
Fuimos testigos de los primeros besos, de las primeras lágrimas...y sin darnos cuenta, dejamos de ser niños....para caminar nuestros propios caminos...
Caminos angostos, en los que no habÃa espacio para todos...donde las opciones, buenas y malas, se nos ofrecieron en distintas bandejas, y fueron haciendo mas larga la distancia del abrazo.
Hoy, recibà en mi Email, una foto de Tenshi, el primer hijo de Vanesa...al verlo sonreÃ, recordé esos dÃas donde Tom Cruise o Axel Rose, eran nuestro tema preferido...
Recuerdo lo triste de su partida, cuando por razones laborales de sus padres, debió partir a Japón....creÃamos que todo acabarÃa...pero hoy, luego de tantos años...la amistad no ha meurto...el amor no ha sido vencido por la distancia...Verla convertida en madre, con su hijo en brazos, me obliga a pensar en todos los otros, en los que hoy están silenciados por la lejanÃa de las opciones, por la acción del tiempo sobre los afectos, por este mundo que a diario amenaza con apresarnos mas, volviéndonos extraños con los que amamos.
Nadie más que ellos podrán dar vida a todos aquellos dÃas donde soñar nos era permitido, donde nos dolÃa “Malvinas”; que nos quedaba cerca...donde fuimos un solo grito con “La Mano de Dios” de Maradona....
Si, nadie mas que ellos pueden vibran al unÃsono con mi alma.
Los extraño...extraño aquellos dÃas...No sé si algún dÃa volveremos a juntarnos...algunos, como Walter, han dicho adiós en el camino....pero si estoy segura que donde sea que estén, seguirán siendo parte de mi vida, seguirá mi oración convocándolos cada mañana....y seguirá el recuerdo, refugiándome en el abrazo amistoso, cuando necesite estar cerca de alguien que realmente sepa quién soy.
Vane, Naty, Maru, Romy, Leo Chico, Leo Grande, MatÃas, Nico, Toty, Pablo F., Pablo, Walter...
Los quiero mucho....ROmy