(Foto tomada camino
a la Colina Interior)
Profanación del Amor
No Basta el amor
cuando los duendes de la ilusión
han sido hurtados a la vida.
He deshojado en silencio nuestra historia
y en cristales salados sepulté lo que pudo haber sido.
El reloj marca un presente que nos encuentra ajenos,
y debemos dejar a Alicia y su paÃs maravilloso,
para volver a esta tierra
donde no podemos mirarnos a la cara.
Desgajamos en mentiras
el sagrario donde habitaba la confianza.
Hay ausencia en esta casa que nos queda grande.
Ya no vale encender los cirios,
hemos profanado el lecho
llenándolo de fantasmas callejeros,
que hacen insoportable el abrazo antes de dormir.
No mires hacia atrás,
es hora de partir...
Dividamos los recuerdos
para que no pesen tanto,
guardemos las lágrimas para el dÃa del juicio,
y quizás,
algún dÃa,
al deshacernos de las marcas que nos hemos dejado,
se nos permita borrar nuestros nombres
del libro de la vida.
No Basta el amor
cuando los duendes de la ilusión
han sido hurtados a la vida.
He deshojado en silencio nuestra historia
y en cristales salados sepulté lo que pudo haber sido.
El reloj marca un presente que nos encuentra ajenos,
y debemos dejar a Alicia y su paÃs maravilloso,
para volver a esta tierra
donde no podemos mirarnos a la cara.
Desgajamos en mentiras
el sagrario donde habitaba la confianza.
Hay ausencia en esta casa que nos queda grande.
Ya no vale encender los cirios,
hemos profanado el lecho
llenándolo de fantasmas callejeros,
que hacen insoportable el abrazo antes de dormir.
No mires hacia atrás,
es hora de partir...
Dividamos los recuerdos
para que no pesen tanto,
guardemos las lágrimas para el dÃa del juicio,
y quizás,
algún dÃa,
al deshacernos de las marcas que nos hemos dejado,
se nos permita borrar nuestros nombres
del libro de la vida.